La niña de tacones amarillos, por Anita Remón (SAE)
"La Niña de Tacones Amarillos" es la ópera prima de Luján Loioco. Por las condiciones de producción de la película Luján tuvo que filmar con lo justo, así que la primer “edición” se hizo durante el rodaje: quitó escenas del guión original conservando la integridad de la historia.
Entonces a la hora del montaje nos encontramos con un material algo acotado; sacamos las escenas que no nos funcionaban y a partir de ahí el desafío consistió en crear tiempos, ritmos y transiciones. Nos abocamos a usar la creatividad y las posibilidades del sonido para terminar de completar estas transiciones (que por lo general cuentan la mutación que paulatinamente va sufriendo el lugar donde sucede la historia y la forma en que ésta afecta el devenir o la suerte de la protagonista) e incluso, en algún caso, construir alguna escena más narrativa.
Otra cosa que nos guió en el montaje fue la premisa de estar siempre cerca de Isabel, la protagonista, y a través de ella sentir el acoso de la mirada masculina, sus ilusiones y desencantos; incluso sus tragedias. Es decir, identificarnos con su punto de vista. El personaje fue interpretado por Mercedes Burgos, un gran hallazgo de actriz que Luján retrató bellamente.